HERNIA HIATAL

¿Qué es la hernia hiatal?

Es una afección en la cual una porción del estómago se desliza hacia el tórax, a través de un orificio (hiato esofágico) que se encuentra ubicado en el diafragma. El diafragma es el músculo que separa el tórax del abdomen y que se utiliza en la respiración. El hiato esofágico es un orificio que se encuentra en todos los humanos sin embargo en algunos pacientes a través de este orificio por alteraciones en las estructuras que anclan al estómago, parte de este órgano pasa del abdomen hacia el tórax.

¿Cuál es la causa?

Se desconoce la causa de este tipo de hernias, pero puede ser el resultado del debilitamiento del tejido de soporte, como obesidad, edad avanzada, o alteraciones anatómicas que se presentan desde el nacimiento.

Los niños con esta afección por lo general nacen con ella (congénita) y a menudo está asociada con reflujo gastro-esofágico en bebés.

Las hernias de hiato son muy comunes, especialmente en personas mayores de 50 años y pueden ocasionar reflujo (regurgitación) del ácido gástrico desde el estómago al esófago.

¿Cuáles son las manifestaciones?

•Eructos
•Dolor en el pecho
•Acidez gástrica que empeora al agacharse o acostarse
•Dificultad para deglutir

Una hernia de hiato en sí rara vez presenta síntomas. El dolor y la molestia generalmente se deben al reflujo del ácido gástrico, el aire o la bilis. El reflujo sucede más fácilmente cuando hay una hernia hiatal, aunque una hernia de este tipo no es la única causa de reflujo.

¿Cómo se hace el diagnóstico?

En el Instituto de Salud Digestiva y Hepática se puede llevar a cabo los siguientes exámenes:

•Endoscopia
•pHmetría
•impedancia esofágica
•Metría tipo bravo
•Manometría esofágica
•Manometría esofágica de alta resolución

¿Cuál es el tratamiento?

El objetivo del tratamiento es aliviar los síntomas y prevenir las complicaciones.

La reducción de la regurgitación de los contenidos estomacales hacia el esófago (reflujo gastroesofágico) mediante medidas dietéticas e higiénicas (elevar la cabecera de la cama, y esperar por lo menos dos a tres horas después de comer o cenar antes de ir a la cama, aliviará el reflujo y por lo tanto las molestias asociadas a este.

Asimismo, se pueden prescribir medicamentos para neutralizar la acidez estomacal, disminuir la producción de ácido o fortalecer el esfínter esofágico inferior (el músculo que impide que el ácido se regrese en el esófago).

Otras medidas para reducir los síntomas abarcan:

•Evitar las comidas pesadas o abundantes
•Nunca acostarse ni agacharse inmediatamente después de una comida
•Bajar de peso y dejar de fumar

Si no se logra controlar los síntomas con estas medidas, o si se presentan complicaciones, puede ser necesaria una reparación quirúrgica de la hernia.

Complicaciones

•Esofagitis
•Esófago de Barrett (cambio en el epitelio del esófago por un epitelio intestinal que puede incrementar el riesgo de cáncer de esófago
•Aspiración pulmonar
•Sangrado lento anemia por deficiencia de hierro (debido a una hernia grande)
•Estrangulación (obstrucción) de la hernia